Kipli es un fabricante de colchones italiano cuyas ventas están empezando a extenderse en España por méritos propios.
Davide y Antoine se propusieron crear la superficie de descanso más natural posible, ofreciendo una alternativa de mercado diferente y con la que sentirse plenamente identificados.
¿Lo han logrado? Con creces. Han creado algunos de los mejores colchones del mercado. 💪
Si te preocupa la sostenibilidad y la salubridad de los materiales en productos para tu hogar, tienes ante tus ojos un análisis minucioso de la mejor opción para tu sueño.
Pero no creas que los materiales naturales lo son todo, la marca ha conseguido diseñar y fabricar colchones que compiten de tú a tú con las mejores marcas y sus modelos de alta gama. Revisamos para ti todas y cada una de sus características. 🧐
Pero como cualquier producto que suponga cierta inversión, Kipli también tiene sus pros y sus contras.
Si bien podemos adelantarte que los primeros son muchos más, es importante que te contemos todo lo que puedes encontrar para que luego no haya sorpresas.
Y es que sobre gustos no hay nada escrito, y puede que una sola característica pese más en tu decisión que todo lo demás, así que vamos allá.
Tras varias noches de prueba durmiendo sobre el colchón Kipli y analizando ambas caras para comprobar sus respectivos grados de firmeza, en Prueba de Colchones tenemos una opinión formada al respecto y no pensamos guardárnosla para nosotros.
Tenemos muchas ganas de compartirla contigo para que, si decides hacer una inversión de estas características, puedas hacerla con total seguridad. 👍
Con respecto a las cuestiones del proceso de compra, nuestro tiempo de espera para recibir el pedido fue de dos semanas exactas, 14 días que pueden hacerse largos si lo necesitas con cierta urgencia, pero que resultan completamente comprensibles teniendo en cuenta que se fabrican bajo encargo.
Por lo general, el repartidor no subirá tu nuevo Kipli a casa, por lo que debes tener en cuenta que se trata de un producto pesado y solicitar ayuda si crees que puedes necesitarla.
Una vez en casa, deberás retirar el saco de yute natural que envuelve al colchón y recortar con cuidado el plástico donde se encuentra envasado al vacío.
Verás que alcanza su estado natural con facilidad, más que un colchón viscoelástico.
Como hemos comentado anteriormente, la compra incluye 100 noches de prueba y devolución gratuita en caso de no adaptarte a él -te recomendamos probar durante varias noches para asegurarte- y 10 años de garantía para defectos de fabricación.
A la hora de descansar, te recomendamos que pruebes primero la cara que ofrece una firmeza media-alta, ya que suele ser la que más gusta entre los clientes.
Si pasadas unas cuantas noches no te adaptas a esta dureza, voltéalo y prueba la parte más blanda.
Aunque es un colchón pesado, al menos la funda cuenta con unas asas cosidas a mano para facilitar este tipo de movimientos. ⚖
Durante tus pruebas, notarás con el paso de las noches que el colchón se adapta cada vez más a ti y tu cuerpo a él, es una superficie muy adaptable y con los puntos de presión correctamente ubicados, por lo que a priori debería resultarte bastante cómodo.
Verás que su funda es suave y transpirable al igual que el propio colchón, aunque te aconsejamos que ventiles bien la habitación todos los días, ya que le cuesta expulsar humedades.
Finalmente, podemos confirmar que la independencia de lechos está muy conseguida y que los movimientos de tu pareja te parecerán prácticamente imperceptibles desde el otro lado de la cama. Casi tanto como ocurre con la combinación de viscoelástica y muelles ensacados.
Su precio nos pareció bastante alto, pero fue algo que comprendimos a la perfección tras haberlo recibido y probado: los materiales naturales, la fabricación artesanal y la calidad de los resultados hacen del importe una cifra completamente razonable. 💰
Seguro que a la marca italiana le alegra que te hagas esta pregunta, porque si de algo puede presumir por encima de todo es de la composición de sus colchones.
Lo cierto es que Kipli destaca en varios aspectos, pero existen varios colchones de otras marcas que están a su nivel o incluso por encima en algunos factores, como el colchón Emma Hybrid Premium, el Hypnia Bienestar Superior o el Tempur Original, entre otros.
Sin embargo, cuando hablamos de materiales no hay color.
Es lo que tiene apostar por elementos naturales y sostenibles.
Si observas el interior de un colchón Kipli, encontrarás a primera vista grandes diferencias con cualquier colchón al uso. No podrás empezar a contar capas y buscar un largo listado de materiales diferentes; el colchón italiano es tan simple como efectivo. 🍃
El colchón Kipli está compuesto por dos capas de látex natural, así, sin más.
Y son dos, pero bien podría ser una, porque la idea de crear un colchón con dos tipos de firmeza -que nos ha parecido magnífica, por cierto- hace indispensable emplear dos grosores -15 y 5 cms respectivamente- y densidades diferentes.
Si ofrecieran tan solo un grado de firmeza, una capa sería suficiente.
El tratamiento es el mismo en ambos casos, látex líquido 100% natural vulcanizado mediante sustancias químicas -zinc y azufre principalmente- en moldes que generan los huecos necesarios en la superficie.
A continuación se lava para eliminar impurezas -el resultado final es de un 97% de látex natural, cuando el mínimo exigido por la Unión Europea para considerarlo como tal es de un 85%- y pasa por un doble proceso de secado, en estufa y microondas industriales.
Finalmente las dos capas se pegan entre sí con una mezcla de látex líquido y agua.
La obsesión de los creadores de Kipli por la sostenibilidad y la naturaleza alcanza su punto álgido en las fundas de sus colchones. Materiales orgánicos y tratados con el máximo respeto por el medio ambiente configuran un pedazo de tela que se antoja esencial para la vida útil de cualquier base de descanso.
Tencel, algodón y lana orgánicos son ensamblados a mano en la provincia de Turín para dar lugar a una protección sin igual en el mercado del sueño. ��
La transpirabilidad es una de las características principales de este elemento cuyo relleno de lana también permite la termorregulación en el producto. Si eres especialmente exigente en estos aspectos o en la sostenibilidad en tu consumo, créenos: ¡apuesta por el Kipli!
Si vas a invertir en un colchón caro, el Kipli debería estar posicionado entre tus principales opciones.
No sólo porque sea un colchón de gama alta, que lo es.
Sino también porque estás comprando dos firmezas en una sola superficie, porque es ecológico y porque es de un material que, si te adaptas a él, te va a resultar maravilloso.
Echa un vistazo a los precios, pero no te dejes llevar únicamente por ellos. Valora tu descanso.
Y ya que haces una gran inversión, está claro que la flexibilidad y la adaptabilidad pasan a ser una exigencia.
No te preocupes, en este aspecto Kipli también marca la diferencia. Como ya hemos explicado en su composición, si te decides por el fabricante italiano vas a poder disfrutar de dos niveles de firmeza diferentes, algo poco frecuente en este sector.
Por un lado te encontrarás con un nivel de firmeza media, mientras que si decides voltearlo pasarás a descansar sobre una base de dureza media-alta.
En cualquier caso, no vas a encontrar un colchón excesivamente blando o duro en ninguna de sus dos caras; está pensado para ofrecer comodidad a todos los gustos, pero moviéndose siempre en rangos dentro de lo común.
En este sentido, se trata de uno de los mejores colchones del mercado.
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Podríamos darte una respuesta rápida y breve afirmando sin dudarlo que sí, que se adaptará a tus posturas con total seguridad.
Sin embargo, en Prueba de Colchones no nos gusta la letra pequeña, por lo que tenemos que hacer ciertos comentarios a este respecto.
En primer lugar, volviendo a las dos caras que ofrece el producto, consideramos indispensable que pruebes las dos, porque es altamente probable que al menos una de ellas te resulte muy cómoda. ☁️
En segundo lugar, y no por eso menos importante, hemos de confesar que el látex es un material un tanto especial, por lo que no deberías esperar adaptarte al colchón en las dos primeras noches.
Dale una oportunidad durante unos días a cada cara y podrás comprobar cómo el colchón se adapta a ti sin el menor problema, ya que tiene perfectamente distribuidos sus puntos de confort, que en el lado de mayor firmeza llegan a ser 7.
Así que, duermas bocabajo, bocarriba o de lado, acabarás sintiéndote como en una nube.
En realidad, la transpirabilidad del Kipli es una de las mejores que hemos podido probar; sin embargo, hay un pequeño pero que no podemos pasar por alto teniendo en cuenta que buscamos hacer un análisis honesto.
Es un colchón al que le cuesta un poco eliminar humedades por las características del látex natural, aunque esto también ocurre en los colchones de látex sintético.
¿Significa esto que retiene la humedad? �� No, pero sí tardará más que otros en eliminarlas.
En cuanto a la termorregulación no podemos poner la menor pega.
Para ser sinceros, nos preocupaba un poco el relleno de lana de la funda de cara al verano, pero nada más lejos de la realidad.
De hecho, se trata de un material que, por su disposición en el colchón, resulta idóneo para mantener la frescura. Nuestros prejuicios en este caso estaban basados en el desconocimiento, por lo que te despejamos la duda para ahorrarte una posible preocupación. 😊
Si bien los colchones híbridos ofrecen una independencia de lechos prácticamente inmejorable por su composición, Kipli nos ha sorprendido nuevamente en este aspecto.
Lo cierto es que está muy cerca de la combinación de viscoelástica y muelles ensacados, como la del Emma Hybrid Premium, a la hora de aislar los movimientos entre uno y otro lado del colchón.
La flexibilidad del látex natural -mucho mejor y más duradera que la del látex sintético- y el tratamiento y forma que le confieren en su fabricación han logrado ofrecer un plácido descanso independientemente de lo inquieta que sea tu pareja al dormir.
Además, es el material que mejor se adapta a las camas articuladas.
Como siempre, tratamos de buscar las opiniones más habituales entre las personas que ya han adquirido el producto para mostrártelas tal cual. Siempre ayuda escuchar más de una voz a la hora de informarse y tomar una decisión. A continuación puedes ver una muestra.
Opinión en Trustpilot ⭐⭐⭐⭐ Compré dos individuales para la cama de matrimonio para gestionar mejor la limpieza: por suerte, dado lo mucho que pesan, ¡una cama de matrimonio jamás hubiera podido colocarla! Llevo 40 años durmiendo sobre látex y estos colchones hasta ahora no tienen problemas, llevo 10 meses durmiendo sobre ellos. El único problema es el peso, por lo que ya no puedo levantar la base de la cama para acceder a la caja, ¡tenemos que hacerlo entre dos! | Opinión en Trustpilot ⭐⭐⭐⭐⭐ ¡Muy satisfecho con nuestra compra! El colchón y las almohadas son de excelente calidad! Se adapta perfectamente al peso de tu cuerpo y por la mañana te levantas descansado y al cabo de unos minutos, ¡el colchón está como nuevo! ¡La funda del colchón es hermosa a la vista y funcional! Excelente servicio al cliente y logística. ¡Entrega realizada dentro de los 5 días hábiles con el mensajero que llamó antes de la entrega para concertar una hora! | Opinión en Trustpilot ⭐⭐⭐⭐ El colchón es realmente cómodo. El único pequeño defecto es el forro muy corpulento, casi acolchado, que se aleja de la comodidad del látex y da la sensación de estar suspendido. Reduciría el grosor en favor de un mayor cuidado en los acabados (¡los hilos de la tela cortada corren el riesgo de quedar atrapados en la cremallera!) |
En general, si preguntas a cualquier cliente por su experiencia de compra en Kipli te dirá que ha sido bastante buena. Nosotros, al igual que tú, nos consideramos un público exigente y estamos totalmente de acuerdo con esta afirmación, pero añadiremos que no es perfecta.
Siempre hay algunos aspectos a mejorar. 🔝
En muchos aspectos están al mismo nivel que la mayoría de grandes marcas del sector, como son el envío gratuito, la garantía de 10 años para defectos de fábrica o los 100 días de prueba para poder devolver el producto de forma gratuita si no te convence.
En cuanto a lo que pueden mejorar, hemos de decir que son meros detalles que ni mucho menos influyen en la decisión de compra, además de estar completamente justificados.
En primer lugar, el tiempo de envío es más largo del que nos gustaría, moviéndose entre los 10 y los 15 días, aunque a su favor hay que decir que trabajan por encargo, que el proceso es más minucioso que en otras marcas y que se envían desde Italia -hay marcas que siendo más cercanas ofrecen plazos similares o mayores-. 📅
Por otra parte, el saco de yute natural que recubre el plástico que a su vez envuelve el colchón, parece poca protección ante posibles golpes con objetos punzantes, además de dejar algún que otro residuo.
No obstante, es comprensible y loable la apuesta de la marca por estos materiales. Nuestro deber es informarte, pero no nos parece una gran pega.
Finalmente, si decides adquirir el Kipli podrás financiarlo sin intereses, aunque en este caso sí estaríamos hablando de una pequeña desventaja con otras marcas de la competencia, ya que el plazo máximo es de tres meses, por lo que se antoja algo corto teniendo en cuenta los precios de sus colchones.
Más allá de su colchón estrella -ofrece también el Bebé Bio y el Esencial-, la marca italiana pone a disposición de sus clientes otros productos relacionados con el descanso. En todos ellos sigue en la misma línea natural y ecológica que te hemos ido explicando a lo largo de la revisión.
En su sección de camas, Kipli cuenta con alternativas para todos los gustos.
Cuatro opciones diferentes, todas ellas en madera natural: el modelo Turín, elaborado en madera de okume y con tablas rígidas, podrás adquirirlo desde 840 €, mientras que la cama tapizada Kipli tiene un precio mínimo de 450 € dependiendo del tamaño que elijas, también incluye lamas flexibles y está fabricada en madera de abeto y forrada con tejido de lino.
Los otros dos modelos incluyen cabecero y podrás elegir entre lamas rígidas o flexibles, son la cama Lyon y la cama Marsella, ambas construidas a partir de madera maciza de haya y con un coste de 900 € y 870 € respectivamente. 🛌
Por lo que respecta a los nórdicos la diferencia es estacional.
Ambos son transpirables, veganos y antiácaros, además de estar elaborados a partir de fibras naturales.
¿La diferencia? El esencial es termorregulador y está indicado para los meses de verano, mientras que el original es más cálido y suave, diseñado para que no vuelvas a pasar frío en una noche invernal cualquiera.
En cuanto a las almohadas, el fabricante oferta dos modelos diferentes, aunque con el mismo precio para sus productos de menor tamaño: 75 €. Además, en ambos casos está fabricada en látex natural, por lo que la única variación que podrás encontrar está en su forma.
El modelo ergonómico se diferencia del original en su distribución, indicada especialmente para clientes con problemas cervicales y de espalda.
Finalmente, Kipli ofrece un único modelo de protector de colchón, nuevamente tejido con algodón orgánico y cuyas características principales son la suavidad, la comodidad y la absorbencia.
Podrás adquirirlo por 49 € si lo consideras una opción interesante.
¿Nuestra opinión? Si la sostenibilidad es esencial para ti, no lo dudes; si podrías hacer la vista gorda en este elemento, te recomendamos fundas de otras marcas que resultan igual de confortables y además incluyen la impermeabilidad.
En el caso de Kipli consideramos que hay niveles de firmeza para todos los gustos, ya que son muy pocas las personas que puedan necesitar un colchón más blando o más duro que cualquiera de las dos caras que ofrece nuestro protagonista.
Otra cosa es que prefieras los muelles ensacados, pero eso ya no es cuestión de firmeza.
Así que si estás más cómodo por el lado medio o por el medio-alto, ¡con este producto la solución es tan sencilla como darle la vuelta a la tortilla! Y al colchón también, claro está. 🔁
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